¿Por qué los cirujanos rechazan los bisturíes de seguridad?
July 7, 2017Por: Adeline Yi, Directora de Producto de Anzen
Han pasado 17 años desde que la Ley de Seguridad y Prevención de Pinchazos exigió a los hospitales la adopción de nuevas tecnologías de seguridad, y la mayoría de los departamentos hospitalarios han adoptado estas medidas, excepto los quirófanos.
Los quirófanos se enfrentan a riesgos aún mayores que los de otros departamentos, con la posibilidad de que los bisturíes causen heridas más profundas y graves. Sin embargo, en todo el país, la conversión a los bisturíes de seguridad ha sido dolorosamente lenta1.¿A qué se debe el retraso?
Simplemente, a los cirujanos no les gustan. En un estudio de 186 médicos de quirófano realizado conjuntamente por la revista Outpatient Surgery Magazine y la International Sharps Injury Prevention Society (ISIPS) en 2011, hasta el 60% de los encuestados informó de que no se utilizaban bisturíes de seguridad en sus instalaciones1. Resultados similares se dieron a conocer en una encuesta realizada en 2016 por MediPurpose en el Congreso Clínico del Colegio Americano de Cirujanos (ACS): El 65% de los encuestados afirmó que sus centros no utilizaban bisturíes de seguridad, principalmente porque no habían encontrado un modelo aceptable.
Los cirujanos citan necesidades insatisfechas
Los cirujanos se quejaban de que los bisturíes de seguridad que habían probado se quedaban cortos en cuanto a facilidad de uso y comodidad. En concreto, los encuestados citaron estas objeciones1:
- No les gustó el tacto general del bisturí de seguridad (84%)
- Tenían quejas específicas sobre su peso, equilibrio o línea de visión (52%)
- Tuvieron dificultades con la vaina de seguridad (25%)
- El método de activación era engorroso (35%)
El 65% de los encuestados informó de que su centro no había encontrado una marca/modelo aceptable de bisturí de seguridad.
¿Cuáles son las necesidades insatisfechas de los cirujanos?
En la encuesta del ISIPS, los cirujanos describieron su bisturí de seguridad ideal: uno con las cualidades táctiles y operativas que necesitarían para sentirse seguros al utilizarlo:
- El mismo peso, equilibrio y afilado que un bisturí tradicional sin seguridad
- Un escudo que no obstruya la línea de visión
- Una hoja fácil de manejar que puede ser expuesta u ocultada sin mirar el bisturí
- Un mecanismo de seguridad que se puede accionar con una sola mano, con cualquiera de ellas
El reto está claro: para acelerar la adopción de los bisturíes de seguridad, los nuevos modelos deben satisfacer mejor las necesidades de los cirujanos.